Como Dejar De Fallarte y Operar Como Un Monje Millonario

La dolorosa verdad que hay detrás de tu incapacidad para cumplir lo que te propones

Antes de empezar, quiero anunciar que la semana que viene recibiréis LA newsletter donde desmontaré el concepto del Monje Millonario en detalle.

Llevo semanas pariendo este profundo concepto que me está cambiando la vida a mi y a emprendedores con los que lo estoy compartiendo.

El Monje Millonario no es solo un concepto, es una forma de vivir y una revolución de consciencia masiva que está ocurriendo en el panorama del emprendimiento.

Permaneced atentos.

Y con eso dicho, disfrutad.

Yo no tengo que trabajar, yo quiero trabajar.

Y no quiero trabajar para evitar o obtener más de algo.

Quiero trabajar porque mis acciones me hacen bien a mi y a los demás.

Quiero trabajar porque lo que hago me gusta tanto que lo haría gratis.

Cuando dejas de hacer las cosas en base a lo que te dijeron que deberías querer y evitar, conectas con la verdadera razón por la que TÚ quieres hacer las cosas.

Ahí es cuando topas con la verdadera motivación (la intrínseca).

Solo ahí puedes decir que haces las cosas por y para el amor de hacerlas.

Conectar con eso es cómo dejas de quemarte y vivir miserablemente.

Este es el lugar desde el que opera el Monje Millonario.

—El Monje Millonario

No consigues tus objetivos porque la parte de ti que te fuerza a tomar acción no eres tu.

La parte de ti que preferiría procrastinar tiene más peso que la que quiere hacer lo que sabe que quiere hacer.

Tus motivaciones están hechas de lo que piensas que deberías querer y en vez de lo que realmente quieres.

Diseñas tu vida alrededor de lo que deberías querer y te olvidas de lo que realmente quieres.

La gente vive en el mundo del “debería” porque se le fuerza a restringir desde bien pequeño y se le ordena lo que debería querer (asignaturas, carreras, y trabajo).

Esto lleva a un lugar más oscuro del que puedes imaginar a largo plazo: la Organización Mundial de la Salud (OMS) demuestra que alguien se está suicidando cada 40 segundos.

Esto son 800.000 personas cada año.

Necesitamos cambiar el lugar desde el cual hacemos las cosas a un nivel colectivo. Y eso solo puede ocurrir empezando por nosotros mismos.

Con responder esta simple pregunta; ¿qué quiero hacer en mi vida? y enfocarnos en vivir dedicados a ello, evitaríamos una gran cantidad de crisis existenciales, depresiones, vida infelices, desperdicios de potencial, y últimamente facilitaríamos la evolución de la humanidad.

Sin embargo, “¿qué quiero realmente?' o “¿qué me importa realmente?” no es una pregunta fácil de responder.

Siento decirtelo, pero vives a base de mentiras…

La espiritualidad significa despertar.

La mayoría de personas, aunque no lo saben, están dormidas.

Nacen dormidas, viven dormidas, se casan dormidas, tienen hijos dormidas, emprenden negocios dormidas, y mueren dormidas sin despertar jamás.

Nunca comprenden la belleza y el encanto de esto que llamamos existencia humana.

— Anthony De Mello

Hasta este momento de tu vida.

Te guste o no, la mayoría de cosas que crees querer son producto de tu condicionamiento:

  • Padres

  • Sociedad

  • Cultura

  • Profesores

  • Influencers

Con esto no quiero decir que ninguno de tus deseos sea puro o genuino, puede serlo.

Principalmente te digo esto para que te pares a cuestionar el POR QUE de tus deseos.

Ahí verás si lo que te impulsa es algo que realmente quieres o no y si es puro.

Porque en el caso de que no lo sean, las cosas pueden acabar muy mal como te he enseñado anteriormente.

Ese es en el peor de los casos.

Consecuencias más leves pero no menos serias pueden llevarte a lo siguiente:

  • Te fallas y saboteas constantemente tus objetivos

  • No disfrutar la vida al máximo cada momento

  • Vivir sutilmente insatisfecho sin saber porqué

  • Desvivirte por algo que no te hará feliz

  • Ver lo que haces como el medio a un fin en vez de verlo como el medio y el fin en si mismo

Y podría seguir.

El caso es que todas las respuestas y los motivos que nos han dado respecto a lo que deberíamos querer han sido prefabricados o impuestos.

Y en eso yace el peligro de vivir desconectado de tu verdad.

Estas respuestas no tienen porque haber sido respuestas literales de tus padres o de las sociedad en general.

¿A quñe me refiero?

Me refiero a que la respuesta a la pregunta "¿qué quiero?" ha sido respondida desde que naciste de maneras muy sutiles.

En forma de expectativas y suposiciones no verbalizadas.

En forma de ver a todo tu entorno absorto por las cosas que "deberías querer"

Imagino que ahora entenderás porqué nunca te habías parado a cuestionarte.

¿Así que como encontrar respuestas de verdad?

Encontrando respuestas genuinas a la pregunta del millón: ¿Qué quiero realmente?

Cuando empecé mi camino de emprendimiento en 2018, siempre aparecía esta pregunta o variaciones de la misma.

¿Qué quieres conseguir?

¿Qué quieres en tu vida?

¿Qué quieres realmente?

Ningún curso o formación que hacia se le escapaba hacer esta pregunta. Quizás hayas experimentado lo mismo.

El caso es que siempre sentía que mi respuesta a esta pregunta era superficial, vacía y que no conectaba con ella profundamente.

Desde 2019 hasta 2024 viví con esa sensación.

Sabía que quería emprender y tener libertad económica pero me faltaba algo.

Sabía que quería vivir de algo que me gustaba pero me faltaba algo.

Sabía que quería ayudar a los demás pero no me faltaba algo.

Sabía que quería compartir mis aprendizajes pero me faltaba algo.

Durante 5 años, el auto-sabotaje y el conflicto interno fueron mis mejores amigos.

Siempre había una sensación de fricción al hacer las cosas.

Lo que lo cambió todo

No fue hasta que supe cómo observar la realidad (lo que ocurría en mi interior y exterior) sin nublarlo por mi descripción, es decir, mi idea o imagen mental de la realidad, que conecté con lo que realmente quería.—

Me di cuenta de que mis deseos y "quiero's" eran algo prefabricado.

Había aprendido a querer y desear las cosas que quería.

No me había parado a observar y cuestionar mis deseos.

Hasta que no supe como ver más allá de la idea de las cosas que creía querer en mi mente, que no conecté con mi verdadera voluntad.

Una persona que piensa todo el tiempo no tiene nada en qué pensar excepto pensamientos. Por ende, siempre está a un pensamiento de la realidad.

—Alan Watts

Nunca me había parado a observar mis deseos sin la interpretación de la mente. 

Nunca había sentido mis motivaciones profundamente desde el ser, solo las había analizado racionalmente. Lo había nublado todo con la mente.

Con esta realización se me hizo evidente que si observaba mi comportamiento, descubriría aquello que quería natural y realmente. Así que empecé a observar mi comportamiento durante los últimos años, y la respuesta se me hizo clara.

Pro tip: empieza ser consciente de tus libros favoritos, películas favoritas, historial de YouTube, cosas en las que inviertes y has invertido, planes que haces y has hecho a lo largo del tiempo…

Durante todos estos años, desde que acabé el instituto, todo lo que había querido era hacer las cosas por el puro amor de hacerlas y sentirme verdaderamente libre y en paz en todos los aspectos de mi existencia.

Y a partir de ahí, he podido crear mi vida en coherencia y alineación con lo que siempre he querido pero que no había detectado (mi verdad).

Curiosamente, esa respuesta nunca había registrado en mi mente como algo válido porque no formaba parte de la lista de "tengo que's y deberías" que la sociedad me había introducido.

La gran diferencia aquí es la alineación.

Esta es la esencia de no ser constante, disciplinado y coherente con tus propósitos; la falta de conexión con lo que quieres más allá de tu mente.

Siempre que operes desde "tengo que's y debería's" o un nivel de deseo mental (egóico), lo que realmente quieres siempre estará escondido.

Porque la realidad es que lo que quieres existe a un nivel mucho más profundo.

Por otro lado, también están las identidades subconscientes que te mantienen atascado en objetivos y deseos que se oponen tu objetivo consciente. Si te interesa saber más sobre como deshacerte de las identidades subconscientes que te hacen vivir en conflicto interno, hablemos por aquí.

¿Significa esto que deberías dejar de ir al gimnasio o de despertarte pronto?

No del todo.

Depende de si tu razón por hacerlo es genuina.

Personalmente me levanto a las 5:30-6:00 cada día y entreno cada día.

No porque debería.

Tampoco por alguien que me diga que lo debo hacer.

Tampoco porque quiera prepararme para competir.

Lo hago porque mi plan es ser del mayor beneficio posible llevando a cabo mi misión.

Lo hago para sentirme con energía, fuerza y en forma.

Lo hago para movilizar energía mental y física estancada.

¿Y porque me interesa todo esto?

Si me fijo, por un lado es porque contribuye a mi mayor bien y al de los demás.

Por otro lado, porque contribuye a mi voluntad o propósito más profundo (lo que realmente quiero);

Hacer las cosas por el puro amor de hacerlas y sentirme verdaderamente libre y en paz en todos los aspectos de mi existencia.

Quizás odie la sensación de someter a mi cuerpo a entrenamiento o frío intenso pero amo lo que eso me trae en consecuencia, que es infinitamente mayor que la sensación de incomodidad que me genera antes de hacerlo.

Aparte, se que eso contribuye a mi estado mental y físico, lo cual es necesario para alinearme con lo que realmente quiero.

En conclusión, todo depende de si tu voluntad es genuina o no.

El caso es que tu experiencia es totalmente diferente a la mía, así que te compartiré una serie de pasos para desbloquear tu motivación natural y puedas llegar a donde realmente quieres.

Haz esto en lugar de ponerte objetivos y cosas por hacer ciegamente

1. Relájate y aquiétate

Si tu vida tiene el aspecto que tiene la vida promedio en 2024, para destapar tu motivación genuina necesitas relajar el culo y encontrar quietud.

Haz lo que sea necesario:

  • Coge un día libre

  • Cancela tus planes

  • Cancela reuniones familiares ni que sea por un dia

Una vez tengas un espacio de tranquilidad en tu día y tiempo libre, haz lo siguiente.

Probablemente estés muy reactivo, inquieto, distraído y estresado.

Esto es muy importante: hacer este proceso una vez ya es una gran victoria. Este es el tipo de práctica que todas las enseñanzas de sabiduría recomiendan remontando hasta las épocas de buddha.

Trabaja con la práctica que he compartido arriba hasta que puedas disfrutarla durante un mínimo de 5 minutos.

Esto te dará un sabor del estado mental que que necesitarás.

Y luego…

2. Estudia tu comportamiento

Evita observarte y evitarás la realidad exitosamente.

— Anthony De Mello

Piensa en lo que hacías ayer, la semana pasada, el mes pasado, el año pasado, y durante los últimos 5 años especialmente en los momentos que tenías tiempo libre.

Personalmente no escribí sobre esto, pero tú puedes hacerlo si quieres. Te ayudará.

Cuando veas patrones, felicitaciones, acabas de descubrir lo que quieres.

Ahora bien, puede que no te guste lo que descubras.

Esto no es un problema.

Si descubres que lo que quieres es beber hasta quedarte en coma cada vez que puedas, bueno, hay una razón por eso. Probablemente trates de escapar de algo.

Sigue practicando y/o escribiendo en plan diario para seguir contemplando y descubras qué podría ser. Es crucial que abordes esto desde la curiosidad.

Este es el proceso de purificación que los practicantes de la sabiduría han disfrutado durante milenios; meditación y contemplación.

Si sigues con esto, detendrás tus comportamientos dañinos y derrochadores.

Es importante señalar aquí que el vino, la comida basura o los atracones de Netflix no son inherentemente malos. Si los etiquetas como tales, estás de nuevo en el reino de los “deberías y tengo que's” de los que estás tratando de escapar.

La verdadera pregunta es:

“¿Estas cosas siempre te resultan satisfactorias cuando las haces?”

O, en otras palabras, “¿hay algo más satisfactorio que podrías estar haciendo?”

La respuesta, en una última instancia, será “sí”, pero el objetivo de este ejercicio es que DEBES llegar a esa conclusión por ti mismo. No tomes mi palabra y te lances a otra dimensión de “deberías”.

Relájate por completo.

Sé brutalmente honesto contigo mismo.

Esta es la única manera de escapar de la trampa.

3. Crea un plan

Si sigues relajándote en el ser (meditando) y continúas purificando tus tendencias insanas con el proceso mencionado arriba, llegarás a tus motivaciones genuinas.

Como he compartido, en mi caso era hacer las cosas por el puro amor de hacerlas y sentirme verdaderamente libre en todos los aspectos de mi existencia.

Cuando me di cuenta de esto y me liberé del compendio de "deberías" que tenía en mi, pude empezar a rediseñar mi vida alrededor de mis verdaderos valores.

Algunos de los "deberías" que me tenían esclavizado eran:

  • Deberías buscar hacer dinero primero para luego dedicarte a tu pasión

  • Deberías descansar lo menos posible para producir más

  • Deberías hacer la misma cantidad de cosas cada día porque sino no eres disciplinado

  • Deberías buscar las cifras altas antes que el disfrute y la sonrisa en lo que haces

Así que cuando me di cuenta de que eso no era lo realmente quería y entendí que esas cosas no eran mi verdad, pude realinear toda mi vida alrededor de lo que realmente quería:

  • Empecé a construir mi marca personal alrededor de mis pasiones

  • Dejé de prestar atención a las cosas que no me nutrían

  • Disfrutaba de la rutina que me establecía en mi dia a dia

  • Hacía las cosas por que disfrutaba y me nutría un montón hacerlas

  • Pude extraer el valor de mi experiencia, conocimiento y pasiones para crear un negocio que me diera la libertad que deseaba

  • Realizé la verdadera libertad (la interna) gracias entender la naturaleza del ser

Y esto es lo que me ha traído aquí.

A sentir que trabajar es jugar y tener la libertad de hacer lo que quiera en la realidad.

Este es el lugar desde el que opera el Monje Millonario; la conexión con el ser y dejar que esa conexión contigo te lleve a crear la realidad que deseas en esta matrix.

Tu vida probablemente sea muy diferente una vez te deshagas de tus exigencias falsamente impuestas y estés alineado con tus motivaciones genuinas en la vida.

Así que necesitas un plan.

Quizás empieces a crearlo una vez acabes de leer esto o quizás se de durante las próximas semanas, meses o años.

Seguirlo como hice yo, te llevará a una vida que se podría describir como un sueño.

Una vez te alineas contigo, las resoluciones de año nuevo o proyectar cualquier propósito a futuro es algo absurdo.

Si realmente lo quieres hacer, lo harás. No te fallarás.

Cuando te liberes de la carga de todas esas imposiciones "deberías" y "tengo que's", la energía que desbloqueas es inimaginable.

¿Y quien sabe a que te va a llevar esa energía?

El caso es que la estarás canalizando a algo que realmente te importa. Mientras a ti te importe y te de lo que realmente quieres, ¿a quien más le tiene que importar?

Eso es todo lo que importa al final.

Donde si o si te llevará esto es a una vida más plena y feliz. También a infinitas oportunidades de ser de beneficio para los demás.

No mañana, no en unos meses o en un año. Sino ahora.

Si necesitas ayuda con todo esto…

Clica aquí si quieres que nos sentemos a crear un plan personalizado basado en todas las herramientas de maestría personal que he puesto a prueba después de varios años y de obtener resultados brutales con decenas de alumnos.

Y si estás listo para empezar a ayudar a otras personas a través de tu conocimiento como hago yo, también te enseñaré como ganarte la vida haciéndolo como lo están haciendo los alumnos dentro de la mentoria de Maestria Personal y Monetización Creativa.

Eso es todo por ahora,

Un abrazo,

Emil.