- El Diario Del Monje Millonario
- Posts
- Deja De Buscar Tu Propósito
Deja De Buscar Tu Propósito
Como Alinear Tu Negocio A Un Orden Mayor Parte 1
Si observas bien, en la sociedad moderna hay un gran problema:
Todo el mundo está en una crisis del propósito, todo el mundo va como un pollo sin cabeza buscando propósito. Hay un gran anhelo por una vida significativa. Pero a nadie se le ocurre que quizás están buscando propósito en el lugar equivocado.
Sin emabargo, este anhelo por profundidad y significado genera un efecto rebote que frena la evolución de tu vida en todos los aspectos. Esto no solo lo he observado en mi sino que lo veo en todas partes.
Hay muchos coaches, guías y terapeutas intentando que su mensaje transmita su propósito espiritual y elevado pero pierden de vista el aspecto práctico y el objetivo de construir un negocio. Que es crecer, impactar, vender, expandirse…
He observado que muchos caen en la trampa de transmitir consciencia, espiritualidad, trabajo interno, etc, y secretamente utilizan el desarrollo espiritual para evadir la falta de progreso en su vida personal y su negocio. Huyen de las tareas difíciles que les llevan a lo desconocido.
Otros se van completamente al otro lado y alimentan la creencia de que más trabajo, más esfuerzo, y más hacer es la respuesta a sus problemas y preguntas más latentes.
Sin embargo, eso no les protegerá de esa sensación de desconexión profunda con la vida.
A esto súmale una confusión sobre lo que significa encontrar tu propósito.
Así que aclarémoslo.
Personalmente me gusta ver la idea del propósito a través 4 etapas o fases de consciencia (esto es algo que aprendí del terapeuta holístico Brian Maierhofer).
Trascender estas etapas te llevan a la alineación natural con tu verdad y el propósito te acaba encontrando a ti.
Ten en cuenta que una etapa y un estado no es lo mismo. La etapa es algo duradero y el estado es algo pasajero. Veamos.
Las 4 etapas de consciencia
1. La consciencia de víctima:
Aquí vivimos sin rumbo. En este estado, dejamos que la vida nos suceda. Somos víctimas de las circunstancias externas, creemos estar a merced de las fuerzas externas de la vida.
2. La consciencia egótica:
No me refiero al ego en el sentido de «ese tiene un ego enorme». Uso el término en sentido psicológico, es decir, nuestro ego como identidad y separación del mundo.
El ego es necesario para sobrevivir, pero también nos limita. No siempre se manifiesta de forma destructiva, pero sí egoísta.
Entiende la consciencia del ego como una búsqueda constante de la satisfacción personal. Las personas en esta etapa de consciencia utilizan todo lo externo como un medio para alcanzar un fin. Es inherentemente solipsista (o egocéntrica).
3. La consciencia de iniciación:
La mayoría de personas está en el estado de iniciación.
Ven la inutilidad de hacer esfuerzos constantes para gratificar su propio ego y buscan ser útiles a su comunidad y al mundo en general.
Estas personas están “tratando de encontrar” su propósito, pero el problema es que el estrés de tratar de encontrarlo (o preguntarse si lo han encontrado) los lleva de regreso a niveles inferiores de pensamiento.
Ejemplo: “¿Por qué no puedo encontrar mi propósito?” (Conciencia de Víctima)
La narrativa actual en torno a la importancia del propósito termina siendo una carga que lleva a las personas al resentimiento, la amargura, el cinismo y la frustración.
Esta tecera etapa es un punto crítico, veamos porqué.
La mayoría tiene una idea equivocada de vivir en propósito y mira en el lugar equivocado.
La idea de que el propósito es algo que debes encontrar es bastante ridícula.
Inherente a la idea de “buscar algo” se encuentra la realidad de que actualmente careces de ello; en esta premisa está implícito un paradigma de escasez.
Esta es la razón por la que tantas personas son conscientes de que quieren servir a algo más allá de ellos mismos pero siguen atascados.
Se quedan atrapados en un ciclo de indecisión, perfeccionismo, victimismo y por ende inacción porque no saben ni pueden decidir que hacer.
Aquí es donde la gente suele quedarse en estados de victimismo, indecisión, y ego o asciende a un estado de crecimiento, sanación y trascendencia.
Así es como asciendes:
Dejando de identificar el propósito con un resultado final
Dejando de suprimir lo que quiere tu alma, corazón, y circunstancias de vida
Trascendiendo y integrando las partes de ti que te mantienen atascado
Conforme despiertas, creces, y encarnas un nuevo estado del ser te conviertes en un individuo mucho más integrado.
Curiosamente, en el proceso de convertirte en un ser más completo y integrado, empiezas a formar parte y habitar una mayor misión en el colectivo. Cuando pasa esto, el amor universal y infinto vive a través de ti y tu vives a través de él.
4. Consciencia de misión:
Aquí nos impulsa la motivación profunda por alinearnos con servir algo más grande que nosotros mismos.
Y este impulso es guiado por el amor universal y el impulso de auto-trascendernos.
Si te fijas en la historia de la civilización y la humanidad ves que todo se construye sobre si mismo como bloques de lego.
Si estudias los campos de la ciencia, el arte, la tecnología, la música, la filosofía, la psicología, etc, todos estos vienen de lo que había anteriormente (si quieres saber de donde te recoumiendo perseguir tu curiosidad).
Te digo esto porque a la consciencia (nuestra capacidad de pensar) le pasa lo mismo. Experimenta una evolución.
“A medida que la conciencia evoluciona, pasa de preocuparse por el yo, a la tribu, a toda la humanidad, y finalmente al Kosmos entero. El amor universal no es un estado emocional pasajero, sino una fuerza integradora que guía las acciones desde una comprensión profunda de la unidad de toda existencia.”
Entonces, la consciencia evoluciona conforme nosotros evolucionamos. Se convierte en algo más global, tolerante, compasiva, y generalmente más progresiva. Es decir, más integral.
Lo cual nos lleva a la siguiente pregunta: ¿Qué mecanismo o poder es responsable de esta evolución?
El mismo mecansimo que es responsable de tu propia evolución.
El amor universal (incondicional) y el impulso de auto-trascendernos.
Es el pulsar de la vida. Esta energía quiere trabajar a través de ti sin embargo no puede hacerlo si no lo dejas de obstaculizarlo con apegos que oscurecen tu mente y corazón.
Por eso, no puedes ayudar al mundo sin antes ayudarte a ti, sin antes crecer y trabajar en ti.
Debes introspectar profundamente y darte cuenta de lo que hay en el camino. Y no solo verlo, sino sentirlo y estar intimamente contigo mismo.
Esto es lo que te lleva a:
Claridad
Energía
Alegría
Significado
Curiosidad
Creatividad
Deseo de servir
Deseo de conectar
De aquí nace el propósito.
No es una vocación profesional (aunque luego se pueda conviertir en una), es una sensación sostenida de amor hacia uno mismo y lo que nos rodea que últimamente es lo que todos estamos buscando.
Realmente, no estás buscando el trabajo perfecto ni la pareja perfecta. No estás buscando la manera perfecta de desarrollar tus habilidades ni la forma perfecta de ser útil.
Lo que buscas es una sensación o sentimiento. Reflexiona bien sobre esto por un momento.
Cuando empiezas sanar y hacer trabajar interior profundo, o dicho de otra manera, cuando solucionas tus problemas personales más ínitmos, encarnas ese sentimiento.
Y una vez lo encarnes, el pulsar de la vida se expresa a través de ti para dar pie a la realidad que quieres.
En términos más simples, no busques propósito, busca despertar a tu verdad, crecer (sanar), y mostrarte en el mundo dejando que el impulso del amor universal y la auto-trascendencia te guíen.
Mi manera favorita de despertar, crecer y hacer tangible ese crecimiento es a través de la Transformación Subconsciente. Si quieres saber más sobre como beneficiarte de esta herramienta de liberación y reprogramación, escríbeme aquí.
Como comenté en mi última newsletter, lo transcendente no puede ocurrir sin lo terrenal. Así que debes empezar por tus problemas personales más latentes. Dinero, salud, relaciones, felicidad.
Tus tormentas emocionales.
Tu estilo de vida insano.
Tu estado de supervivencia.
Un trabajo que no te llena.
Tus relaciones tóxicas
Ahí empieza tu propósito.
Vamos de problemas más básicos a problemas más complejos.
La solución a los problemas que tienes en tu vida personal son el fundamento de alinear tu vida y negocio a una misión o orden mayor.
Son el fundamento para hacer algo realmente significativo.
Por ejemplo, tu propósito de adolescente quizás era meterte al gimnasio para aumentar tu auto-estima y ser atractivo para las chicas. Trascendiste esos problemas y tu razón por ir a entrenar ahora es algo mucho más profundo.
Enfrentar tus problemas básicos es la única manera de abrirte a fases de desarrollo superiores y por tanto un propósito que involucre a más personas o la solución de un problema colectivo.
El problema más latente en tu vida es tu propósito en este momento. Este irá cambiando.
Cuando haces el trabajo necesario y empiezas trascender tus problemas personales, simplemente se trata de mostrarte y construir algo en el mundo alineado a tu gran visión.
Para acabar os dejo estas preguntas de claridad (son la base para construir un negocio alineado y lleno de significado):
Imagina que te quedan 10 años de vida, ¿como querrías vivirlos?
¿Que actividad te hace olvidarte de comer?
¿Como es un día en la vida de tus sueños (de principio a fin)?
¿Que haría de tu vida unas vacaciones constantes?
¿Que harías gratis durante el resto de tu vida?
¿Que huella quieres dejar en la humanidad? Que te importa?
¿Cómo quieres ser recordado?
¿Que quieres crear?
¿Cuál es el mayor problema en la humanidad y en tu vida que quieres resolver?
¿Cuál es el GRAN problema que quieres resolver, o has resuelto, en tu vida? Si pudieras resolver eso para otras personas a escala, ¿te gustaría hacerlo?
¿Que se siente como jugar para ti pero trabajo para los demás?
¿De que no puedes dejar de hablar a amigos y familia?
¿Que te interesa lo suficiente como para empezar a investigar sobre ello y empezar a compartir tus descubrimientos?
¿Que talentos, habilidades, y rasgos das por hecho que son de gran valor para los demás y la gente a tu alrededor?
¿Qué hacías de niño durante horas sin cansarte ni aburrirte? Que te gustaba sobre lo que hacías? Reflexiona.
¿Qué cosas no les parecían agradables a tus amigos y que podías hacer todo el día sin perder energía?
Esta es la primera parte de cómo alinear tu negocio a un orden mayor y hacer dinero bonito. La segunda parte será más práctica.
A principios de la semana que viene tendréis la segunda parte.
Espero que la hayáis disfrutado,
Emil.
pd:
Gratitud profunda por estar creando el producto que yo habría deseado comprar y ver los alumnos de la Incubadora ganando:


